lunes, 13 de diciembre de 2010

Sherlock Holmes existe

¿Qué pasaría si Sherlock Holmes fuera de 2010 o no de 1887? Pues sin duda esto:


Y es que esta serie ha conseguido mostrar el auténtico espíritu y filosofía de este personaje. La serie cuenta nada más que de 3 capítulos, eso sí, cada uno de ellos de una hora y media de duración, cosa que agradezco porque es como si ves una película detrás de otra y si ya se me hacen cortos los capítulos de 40 minutos de las series que me gustan, esta tiene la duración perfecta para mí.

La serie cuenta el momento en el que Watson entra en la vida de Sherlock, un veterano doctor de guerra conoce a este curioso personaje apasionado por los misterios y creador de la deducción lógica. La serie introduce elementos y casos de los libros de Conan Doyle más algunos elementos inventados, y la mezcla es la combinación perfecta para crear a la mejor representación de Holmes, mejor que la de Guy Richie. Por este motivo, si eres lector de Doyle, te encontrarás con "Estudio en escarlata", aquí transformado en "Estudio en rosa", el primer capítulo de la serie.

Cada capítulo es único y buenísimo, aunque en el segundo flojea un poco, solo un poco, porque el misterio no es tan apasionante, el primero y sobretodo el tercero son los mejores. Sin duda hace un retrato de los personajes perfecto, Watson sin ser gordito y tonto, es un médico al que le gusta la acción, avispado y le encanta esa relación amor/odio con Holmes. Sherlock apasionado y frikazo de cualquier misterio, tanto que resuelve los casos gratis y por pura diversión con tal de mantener el cerebro ocupado, es por ello que para relajarse cuando se aburre se mete chutes de parches de nicotina (no como en la obra de Doyle que era cocaína), y Moriarty, el archienemigo de Holmes. Si Sherlock es una mente que pone todo en "orden", Moriarty es un agente del caos, tal para cual.

La banda sonora también juega un papel muy importante en la serie, una de las mejores que he oído para algunas series y que combina a la perfección con la ambientación de esta. Y sin olvidar la cabecera llena de motivos londinenses que a más de algún admirador le agradará, se encuentran algunos planazos que tienen que ser dignos de ejemplo en asignaturas como Análisis de la imagen o Puesta en escena. Y es que los ingleses son los reyes de las series digan lo que digan, manteniendo a parte a la HBO.

Lo único que me apena es que sea tan corta y que se tarde un año entero en continuar la temporada siguiente. Mientras, estaré a la espera. I LOVE SHERLOCK.

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